Cómo explicarle que la Real o se siente o no se tiene. Que cuando se es de la Real no hay un segundo equipo. Que cuando más orgullo se siente es casi cuando está más hundida. Cómo explicar que fue casi como el Barça cuando el aita era como tú, que tenía un Messi (López Ufarte), un Casillas (Arconada) y un Gerrard (Zamora) en el mismo equipo, cómo explicarle la emoción que suponía preguntar a un señor con un puro enorme si tenía una entrada de sobra para entrar en Atotxa, o lo que representaba zamparse una palmera de chocolate y nata en el fondo sur. Cómo describirle esa mezcla de olores, a fruta, a caramelo, a humo de Habanos, a sol y sombra en la barra del viejo campo. Cómo explicarle que había que llevar un papel con algo que se llamaban 'las claves del simultáneo' para saber los resultados de otros. Cómo dibujar el sentimiento al ver a Bakero, Górriz, Aldridge, Kodro, De Pedro, Xabi Alonso vestidos de txuri urdin. Cómo contar que fuimos a Vigo volando en el avión y mentalmente, porque íbamos para ganar la Liga, sí, como el Barça el año pasado. Cómo explicarle que se va a tener que comer decenas de partidos desesperantes como el de ayer tarde, con un equipo que no se encuentra a sí mismo como la Real, ante un rival del montón que emplea toda suerte de artimañas para arañar un mísero punto.
¿Por qué somos de la Real? La Real está hoy de celebración, porque cumple 100 años. 100 años de una grandeza que no siempre es fácil de transmitir. Llegará un día ese momento. Papá, ¿por qué somos de la Real? Y este progenitor que todavía no lo es, ni siquiera un proyecto, se le quedará mirando a la criatura como la vaca al tren y le dirá: 'Cállate y cómete los macarrones'
@PakoRSlive
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta! :)